Actividades para trabajar el duelo en el aula

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La muerte forma parte de la vida, así que, hay que ayudar a los niños a asumirla como un proceso natural. Lamentablemente, llegar a comprender la muerte no impide que nos sintamos tristes y que tengamos ganas de llorar, o bien que necesitemos expresarnos y compartir nuestro dolor con los demás. Hoy os queremos proponer actividades que podéis hacer en el aula para trabajar el duelo, adaptando vuestra experiencia a las circunstancias particulares de lo que ha sucedido.

Un mural para el recuerdo

Las personas, cuando mueren, dejan una huella que a menudo no se puede borrar. De hecho, lo más normal es que su recuerdo continue vivo en nosotros. Hablamos y pensamos en todas aquellas cosas buenas que hecho para los personas que quería i en definitiva para nosotros. En este mural, los niños estamparán su huella -del pie o de la mano- i escribirán un mensaje o bien una frase que recoja un recuerdo, una experiencia, un deseo…

También añadiremos el nombre de la persona que ha muerto con colores alegres. Podéis tener el mural unos días en la escuela y después regalárselo a la familia como si fuese un pequeño homenaje o recuerdo.

 

Un mensaje al cielo

A menudo, cuando un niño nos pregunta donde está la persona que ha muerto, acostumbramos a responder: «en el cielo». La respuesta tiene mucho que ver con nuestra cultura, tanto religiosa como espiritual, y no podemos hacer otra cosa sino que aprovechar este hecho para llevar a cabo la actividad que os proponemos a continuación.

Ya sea en grupo -porque ha muerto un compañero, una maestro o alguna persona muy especial para todos- o individualmente, en compañía de la familia, os proponemos escribir un pequeño mensaje en un papel y atarlo en un globo. Salid al patio o al aire libre, en un entorno especial e íntimo para la familia y la persona querida. Cuando el niño esté preparado, haced volar el globo: es un mensaje para el cielo.

Una sesión de cine

Otra actividad interesante para trabajar la muerte es la visualización de una película adecuada a su edad. Al acabar, podéis hablar y preguntar a los niños qué han sentido, qué emociones les han invadido, qué piensan ahora, etc. También pueden hacer un pequeño escrito compartiendo sus reflexiones o un dibujo que les inspire.

En el primer ciclo de primaria puede ser interesante ver Buscando a Nemo (2003), mientras que para el segundo y el tercero os recomendaríamos Cuarta planta (2003), Mi chica (1991) o El niño del pijama de rayas (2008).

 

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